Cada vez que se publican los resultados encuesta sobre alimentación infantil, en Vicente Peris nos echamos las manos a la cabeza. ¿Cómo es posible que con la información nutricional que tenemos a nuestro alcance, todavía haya tantos niños con hábitos alimenticios tan perjudiciales?
El recurso de la falta de tiempo de algunos padres para optar por almuerzos y meriendas tipo bollos o galletas cada vez se sostiene menos. Existen opciones de ‘comida rápida’ saludable en cualquier supermercado, como es el caso de la fruta pelada y cortada, fruta envasada preparada para consumir en el momento.
Las ventajas de la fruta envasada individual
En Vicente Peris hace siete años que inauguramos nuestra división de fruta y verdura pelada, troceada y lista para consumir. Nuestros productos se pueden encontrar en diferentes supermercados (El Corte Inglés, AlCampo, Consum…) bajo dos marcas: Peris y Frutifresh.
Lo que aportamos a este sector es la máxima calidad, tanto por la elección de las mejores frutas, en su punto óptimo de madurez, como por el cuidado en el proceso de trabajo con ellas. Además, también somos muy estrictos con la seguridad alimentaria. De hecho, el trabajo con la fruta pelada y troceada (fruta de IV gama, como se denomina en el sector) lo realizamos en una sala blanca, es decir, un espacio aséptico, con una temperatura constante por debajo de los 8ºC, y donde renovamos el aire cerca de 200 veces al día. Cuando hacemos un cambio de producto, siempre limpiamos e higienizamos las superficies de trabajo, para que no haya contaminación cruzada con alérgenos, por ello nuestros productos nunca marcan trazas.
El objetivo de cada uno de nuestros pasos es que cuando el cliente final abra esa tarrina que nosotros estamos sellando, se encuentre con una ración de fruta que le nutra y que le haga disfrutar de cada bocado.
Es igual de rápido acercarse a la sección de bollería que a la frutería, que es dónde se encuentran nuestras tarrinas de frutas. Por tanto, el factor tiempo no puede ser el que determine una mala decisión.
Niños dependientes del azúcar y los procesados
Aunque los científicos no se ponen de acuerdo en si el azúcar puede considerarse adictiva o no, lo cierto es que su presencia gusta a nuestro paladar. Si en ocasiones a los adultos nos cuesta poner freno al consumo de productos que sabemos que son perjudiciales para nosotros, imaginad lo que puede suponer para un niño, que no se plantea si un dulce más le va a causar obesidad o diabetes, simplemente atiende al placer que percibe.
Por ello, cuanto menos expongamos a los niños a productos con exceso de azúcar y procesados, menos lo demandarán. En cambio, si les acostumbramos al dulzor natural de la fruta, a su variedad y jugosidad, será más fácil que nos pidan más de estos productos saludables.
Y esa responsabilidad es de los adultos. Por ello, reconocer que lo estamos haciendo mal, si ese es nuestro caso, es el primer paso.
Una de las últimas campañas del Ministerio de Consumo ilustra muy bien esta situación. Bajo el lema #LoReconozco trabajan para promover desayunos y meriendas saludables, con el objetivo de impactar en aquellas familias que nunca se han planteado mejorar estos hábitos o que están empezando a plantearse el cambio. El siguiente video es muy ilustrativo y resulta difícil no ‘reconocer’ que todos hemos caído alguna vez en alguno de estos errores.
El porqué de esta campaña son las cifras de obesidad infantil en España, donde uno de cada tres menores de entre ocho y 16 años sufre sobrepeso u obesidad, según el estudio PASOS 2019 elaborado por la Gasol Foundation. En ese mismo estudio se dice que un 31,7% de los niños y niñas declara desayunar bollería industrial habitualmente.
Otra campaña que también firma el mismo Ministerio se llama ‘Hijos del Azúcar’ e incide en lo mismo, en la cantidad ingente de este ingrediente que ingieren los niños. Según sus cifras, un niño ingiere al año su propio peso en azúcar. Ese es el dato oficial y poco más haría falta añadir.
Beneficios de la fruta en la dieta de los niños
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir un mínimo de cinco raciones de frutas y verduras al día, ya que reduce el riesgo de desarrollar distintas enfermedades como obesidad, enfermedades cardiovasculares, algún tipo cáncer, hipercolesterolemia, diabetes tipo 2, entre otras. Tal y como publicó la OMS en 2020*.
Son una de las fuentes naturales más importantes para obtener vitaminas, minerales, fibra y un alto contenido en agua y todo ello se resume en un ‘chute’ de energía saludable para los niños.
Las frutas favoritas de los niños
Para que los niños y las frutas se lleven bien es mejor empezar por las que son más dulces y también las más refrescantes. Aquí te hacemos una selección en base a nuestra experiencia y a las propiedades saludables que ofrecen cada una de ellas.
- Plátano: fuente de potasio, de vitamina C y de fibra. Además, es rico en manganeso y vitamina B6.
- Sandía: su dulzura y lo refrescante que es suele encantar a los peques. Es baja en calorías y el 92% a base de agua, perfecta para hidratarse en verano.
- Mandarina: fuente de fibra y rica en vitamina C.
- Melón: dulzor natural y saludable. Fuente de fibra y rico en vitamina C.
- Mango: un mango en su punto de maduración es una maravilla y los niños saben apreciarlo. Fuente de fibra, manganeso, ácido fólico y vitamina E, y alto contenido en vitaminas C y A.
- Piña: otra fruta tropical que en su punto es inigualable. Fresca y dulce. Nosotros la trabajamos en dos formatos, a trocitos o en lanzas, y entre nuestra clientela contamos con muchos niños fieles. La piña es rica en fibra, manganeso y vitamina C.
- Manzana: Con muchísimas variedades a nuestro alcance: más dulces, más ácidas, más o menos crujientes… Es una fruta estupenda para los pequeños, y además es rica en fibra y fuente de vitamina C.
Para niños más mayores, con los que no corramos riesgo de atragantamiento, también podemos ofrecerles dos frutas que les suelen gustar mucho:
- Coco troceado: fuente de cobre, hierro, selenio y potasio.
- Granada: rica en fibra, y fuente de vitaminas C y K.
Otro dato a tener en cuenta es que la fruta es mucho mejor consumirla entera que en zumo, ya que en el licuado estamos desechando la mayor parte de la fibra alimentaria y además ingerimos dos o tres veces más cantidad de la ración recomendada, algo que tampoco es aconsejable.
Esperamos que estos consejos os hayan ayudado a resolver algunas dudas y a fijar nuevos objetivos nutricionales. Nosotros seguiremos dando lo mejor cada día en nuestro trabajo para que a vosotros no os falte la fruta de calidad pelada, troceada y lista para consumir de un bocado delicioso y muy nutritivo.