“El agua es vida. Para no dejar a nadie atrás, el agua cuida” .
Ese es el lema a ritmo de canción que ha presentado la FAO para conmemorar el Día Mundial de la Alimentación Saludable 2023 (16 de octubre) y sensibilizar a los más pequeños.
El agua es esencial para la vida del planeta y de todos los seres vivos que lo habitamos. Y el agua es un recurso finito que no siempre se cuida como se debe. Escasez, contaminación… Hay muchos factores que ejercen una presión enorme sobre ella.
El uso del agua en agricultura posibilita que se produzcan alimentos, por tanto no es un agua ‘gastada’ es un agua empleada para la alimentación de la población.
El sector de la agricultura en España está haciendo un enorme esfuerzo desde hace años para mejorar la eficiencia en el consumo de agua. El riego a goteo es un gran ejemplo, que evita malgastar agua, aportando únicamente lo que el cultivo necesita, cuando lo necesita y donde lo necesita.
Por ejemplo, entre las prácticas eficientes que llevamos a cabo en Peris para el riego de nuestros cultivos, el riego a goteo es una de ellas. También tenemos en cuenta la hora a la que regamos, calculamos el agua que necesita cada cultivo y realizamos un adecuado mantenimiento de las infraestructuras de riego.
De estas prácticas para el uso eficiente del agua en los cultivos os hablamos más detalladamente en este artículo sobre la sequía.
Pero hoy lo que queremos es ofreceros formas de ahorrar agua en vuestros jardines, mesas de cultivo y en el riego de vuestras plantas en macetas. Porque esto es una labor de todos, ¿te apuntas al ahorro de agua?
10 ideas para ahorrar agua al regar tus plantas en casa, en tu jardín o mesa de cultivo
1. Elige plantas que requieran menos agua
Si tienes jardín, opta por plantas autóctonas, que estarán adaptadas al clima de tu zona. Otra opción es apostar por suculentas, hay muchísimas, seguro que encuentras la que te enamora. Este tipo de plantas, al igual que los cactus, son resistentes a la sequía y no necesitan un riego excesivo. Si tienes jardín, en la medida de lo posible evita el césped, es muy bonito, pero su consumo de agua es muy alto.
2. Riega en el momento adecuado
Hay dos horas perfectas para regar tus plantas, a primera hora del día y a última de la tarde. Si riegas en las horas de más calor o mayor incidencia de sol, parte del agua se evaporará y no realizará su función.
3. Utiliza acolchado sobre la tierra
El acolchado o mulch consiste en cubrir la tierra con materiales orgánicos, por ejemplo hojas secas, paja o astillas de madera. El acolchado protege la tierra de las altas temperaturas, propiciando una mayor retención de la humedad.
4. Instala riego a goteo
Si tienes jardín, no hay excusa. Si tienes balcón, quizá la logística sea un poco más complicada. Pero lo que está claro es que el riego a goteo programado te dará muchos beneficios. El ahorro de agua será considerable, ya que el riego va directo a la raíz de las plantas. También te liberará de estar constantemente regando tus plantas y será la solución para que tus plantas no sufran o mueran cuando te vayas de vacaciones.
5. Recoge agua de lluvia
Cuando venga lluvia, dispón cubos y palanganas para recoger toda la que puedas y utilizarla para regar tus plantas.
6. Riega menos pero mejor
En lugar de regar todos los días con un poquito de agua, prueba a hacer menos riegos pero más intensivos que empapen bien toda la tierra. Esto, además, propiciará que las raíces busquen nutrirse en capas más profundas, lo que también contribuirá a su resistencia frente a la sequía.
7. Mangueras con boquilla y regaderas, tus aliadas
Las mangueras que permiten ajustar el flujo de agua y las regaderas, que posibilitan una mejor distribución del riego, también contribuirán a un considerable ahorro de agua.
8. Controla la humedad del suelo
Hay veces que la capa más superficial de la tierra está seca, sin embargo, en capas más profundas hay humedad y te puedes ahorrar un riego. Los medidores de humedad te ayudarán a obtener este dato. Los puedes encontrar a un precio muy económico.
9. Reutiliza el agua que utilices en la cocina
El agua de la cocción de vegetales una vez fría o la que utilizas para lavar frutas y verduras es perfecta para regar tus plantas. Eso sí, siempre que no tengan aditivos (sal, bicarbonato, jabones…).
10. Descubre las macetas autorriego
¿Las conoces? Son macetas que tienen un depósito de agua en la base y van regando la planta en base a la necesidad de la misma. Digamos que en lugar de regar por arriba, riegas por abajo, y solo con el volumen necesario.
Esperamos que estos consejos para ahorrar agua al regar tus plantas o jardín te hayan sido de utilidad. Cada gota cuenta, y lo que hagamos cada uno de nosotros, también.